Ciego de Ávila en 2016: menos dinero no significa menos resultados

Ciego de Ávila cerró 2015 con poco más del 92 por ciento de ejecución de su plan de inversiones, ascendente a 336,1 millones de pesos, un resultado que apunta a deficiencias en la planificación y control de las acciones constructivas y de montaje.

Si bien significa, asimismo, la consecución de obras de beneficio social y económico por valor de 310 millones de pesos, la inejecución se traduce en deficiente preparación técnica, bajo rendimiento y mala organización del trabajo de las fuerzas constructoras y la falta de integralidad en los procesos. El impacto más sensible, sin embargo, tiene que ver con la dilación o la no satisfacción de algunas de las necesidades de la ciudadanía.Con la apertura del Hotel Pullman Cayo Coco, aumentó el número de habitaciones en Jardines del Rey

Entre las principales obras que no se ejecutaron, tal cual se previó en el plan, están los círculos infantiles del poblado de Turiguanó y el Villamil, también en Morón; la nueva sede de la Biblioteca Provincial; el proyecto de desarrollo local de Los Buchillones, en Chambas; y los baños de la Escuela de Iniciación Deportiva Marina Samuel Noble.

Solo organismos como AZCUBA, el Ministerio de Energía y Minas y las acciones en el Canal Trasvase lograron ejecutar el ciento por ciento de lo programado. En tanto, las dependencias de los ministerios de la Informática y las Comunicaciones y la Industria Alimentaria, más el Tribunal Provincial, apenas alcanzaron el 80 por ciento de cumplimiento.

No obstante, la provincia concluyó el 2015 con obras de importancia para los ámbitos económico y social, entre ellos la rehabilitación parcial de la Fábrica de tableros en Primero de Enero; la construcción o remodelación de más de 5 000 habitaciones en el destino turístico Jardines del Rey; la terminación del círculo infantil Mi pequeño paraíso, en Morón, y la escuela primaria Marcelo Salado en Punta Alegre (en el municipio de Chambas); al igual que la obra civil del incinerador de cadáveres y restos óseos en la capital provincial.

Para 2016, el plan de inversiones disminuye un 4,8 por ciento en relación con el año que terminó, de manera que el territorio dispondrá de 320 millones de pesos, todavía una cifra superior a lo ejecutado en 2015 y que permitirá asegurar el inicio del curso escolar 2016-2017, terminar las acciones constructivas en los dos hospitales de la provincia y la adquisición de unos 30 ómnibus de la marca Diana.

Además, se continuará priorizando los programas de desarrollo de frutales, cítricos, la ganadería, y el crecimiento del polo turístico en la cayería norte.

La concreción del proceso inversionista en el año que comienza dependerá de la objetividad de lo planificado, la calidad de las contrataciones y del control estricto a pie de obra de los cronogramas de ejecución. Acaso las únicas garantías para utilizar los recursos financieros, materiales y humanos en beneficio del pueblo.

Fuente:Invasor Digital