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Por Julio Juan Leandro (AIN)
El pasado año recibieron cuatro
cosechadoras modernas por un programa de colaboración entre Cuba y Vietnam, que
también abarca asesoramiento técnico con especialista de la nación asiática.
Las máquinas recolectoras son muy necesarias, aunque las áreas están dispersas
en siete de los diez municipios de la provincia y la productividad no cubre lo
previsto.
Inversiones similares posibilitaron,
además, el montaje de cuatro silos de 100 toneladas cada uno, el acoplamiento
de un molino de tecnología brasileña puesto en marcha en 2014 y la entrada de
una retroexcavadora, agregó Romero Vázquez.
El proceso de secado del grano es
una de las principales dificultades, lo cual origina que los cosecheros tengan
que regarlo en vías asfaltadas, que siempre ocasiona pérdidas y recoge
impureza, agregó el dirigente.
Zolia Esquivel, ama de casa, aseguró
que algunos de los arroces que se venden en los mercados agropecuarios
estatales no tienen calidad por la partidura de los granos, la presencia de
piedras y otras contaminaciones.
Campesinos de la cooperativa de
crédito y servicios Agustín Gómez Lubián, del municipio de Bolivia, expresaron
su interés por acrecentar las plantaciones de arroz en la zona de Manga Larga,
pero los canales de riego están obstruidos por llevar muchos años sin
mantenimientos.
Ciego de Ávila deberá aportar este
año más de 10 mil toneladas del cereal descascarado; sin embargo, la demanda es
de 26 mil toneladas, de un alimento imprescindible en la mesa cubana.
Unos 400 campesinos de 34
cooperativas avileñas son los responsables de este cultivo en la provincia,
indicó Hanoi Sánchez, presidente aquí de la Asociación Nacional de Agricultores
Pequeños.
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