Atrasos en la siembra de caña

Inmersos en lograr el incremento de los ritmos de siembra de caña, con el fin de disminuir las más de 700 hectáreas incumplidas al cierre del primer cuatrimestre del año, se encuentran los trabajadores de las bases productivas del sector en la provincia de Ciego de Ávila.

Hasta la primera quincena del presente mes, tres unidades empresariales de base (UEB) de Atención a Productores Agropecuarios están muy comprometidas con sus respectivos encargos de plantación. La situación más tensa se localiza en las áreas abastecedoras del central-refinería Ecuador, a la cual le restan aún unas 1 900 hectáreas por dejar en la surquería, para lo cual deben alcanzar un ritmo diario de 50 o más.

Las dos restantes con retardo en esa vital atención cultural son las UEB que tributan materia prima a los ingenios Ciro Redondo y Primero de Enero, con más de 1 500 por sembrar correspondiente al programa de primavera.

La excepción de la regla, en este caso, es el colectivo plantador de la unidad Enrique Varona, que le sonrió a los primeros cuatro meses, pero no pueden perder ni un instante, pues el central demandará más caña en la venidera zafra; y la presencia de las lluvias, cuando aparezcan por allí, con mayor intensidad, puede dificultarles el accionar de las brigadas, debido a las características de sus suelos.

Para el primer semestre, el plan comprende unas 8 000 hectáreas; y el propósito que sustentan en la Empresa Azucarera es terminar mayo con unas 4 500, por lo que la tarea a acometer en junio es muy fuerte.

Oportunidad y disciplina son palabras claves para alzarse con la sonrisa al final de la meta; de ahí que el aprovechamiento de camiones y carretas, la formación de contingentes especializados, tanto en la siembra como en el corte de semilla, tienen que estar en la mirilla, y, sobre todo, movilizar al ciento por ciento de los disponibles hacia el frente, cuestión que, en algunos lugares, apenas llega al 70.

No se puede olvidar la necesidad de seguir incrementando la limpia integral (manual, riego de herbicida y cultivo desyerbe), con el propósito de atenuar la competencia de las malezas que crecen muy rápido, a partir de la humedad que dejan las lluvias.
Fuente:Invasor Digital