Resalta hotel Meliá Cayo Coco por su integración al entorno

El hotel Meliá Cayo Coco, de la provincia de Ciego de Ávila sobresale en el destino turístico cubano Jardines del Rey por su integración al entorno y el buen uso de los recursos naturales.

Ubicado en una de las zonas más llamativas del archipiélago Sabana-Camagüey, se inserta de manera armónica al medio, pues para su construcción se respetó al máximo la vegetación autóctona de los alrededores.

Según expertos el 45 por ciento de las plantas de la jardinería son nativas de la cayería, por lo que al crecer en zonas arenosas cercanas a las costas, no necesitan regadío y ahorran agua por ese concepto.

Gran parte de las 250 habitaciones del Meliá Cayo Coco están construidas sobre pilotes dentro de una laguna natural de agua salada que separa al hotel del mar.

Para llegar hasta la playa y proteger las dunas de la zona existen pasarelas con pisos de madera que atraviesan un pequeño bosque natural y conducen a los turistas hasta las finas arenas blancas.

Propiedad del grupo hotelero cubano Gran Caribe y administrado por la cadena española Meliá Hotels Internacional, la instalación con sus modernas habitaciones y bungaloes está rodeada de un entorno de altos valores ecológicos y paisajísticos.

Eidel Ramos, especialista de calidad del hotel, señaló a Prensa Latina que por los resultados en el cuidado y protección a la Naturaleza y contribución al desarrollo de un turismo sostenible, obtienen reconocimiento territorial ambiental.

foto 2Con 17 años de explotación el Meliá Cayo Coco tiene a Canadá como su principal mercado, y es muy acogido por visitantes foráneos debido a los elevados estándares de calidad y la excelencia en los servicios.

Su condición de Vanguardia Nacional avala los resultados económicos, el ahorro de portadores energéticos, el sistemático trabajo a la solución o mitigación de problemas ambientales, el uso, y el desarrollo de los procesos sociales y productivos de bienes y servicios.

El polo de recreo Jardines del Rey, ubicado en la cayería norte de Ciego de Ávila, a unos 500 kilómetros de La Habana está considerado entre los destinos turísticos más acogedores de Cuba por sus excelentes playas de origen coralino y su abundante flora y fauna.